La propuesta comienza replanteando las zonas de tráfico rodado y de aparcamiento establecidas en el ámbito de intervención. Como primera decisión se limita el tráfico rodado en el vial de paso por el lado norte de la plaza del Sol a la dirección este/oeste, o sea, desde la Calle Tierno Galván a la Calle Real. Y se incorpora la conexión en dirección norte a la calle Encarnación. En el citado vial este/oeste se establece un aparcamiento longitudinal de 14 plazas. Como concepto fundamental de la intervención se plantea la creación de nuevos espacios de estancia libres de tráfico rodado exceptuando los accesos a los vados existentes. En ambas plazas se mantienen dos laterales de tráfico rodado equipados con aceras accesibles quedando los otros dos frentes construidos de las plazas vinculados a las nuevas zonas de estancia. Los citados accesos a los vados se recortan mediante taludes vegetales que ordenan topográficamente los espacios resultantes y los separan de los ámbitos estanciales. Estos taludes se diseñan con setos continuos y planta tapizantes y algunos árboles singulares de hoja caduca que ofrezcan una refrescante sombra vegetal.
Como elemento de mobiliario que de un carácter innovador a la propuesta se ha diseñado un banco prefabricado de forma pentagonal dividido en cinco módulos. Estos módulos disponen de un complemento de respaldo que se superpone en determinadas unidades para generar cierta diversidad de opciones de uso. Estos bancos prefabricados de forma plegada en su disposición buscan fomentar el descanso, el encuentro y el dialogo ciudadano en este entorno urbano más amable y menos condicionado por el único uso de los vehículos a motor. Los bancos se localizan y se disponen en varias soluciones según se agrupen en conjuntos de dos, cuatro y cinco módulos generando una cierta diversidad de uso y disfrute. El plano de asiento de los módulos prefabricados vuela para ocultar una iluminación rasante del suelo en su derredor.
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